paisaje

Desde el siglo XIX, el paisaje ha sido una prolífera fuente de registro para los fotógrafos locales y viajeros que, a través de sus placas, daban a conocer nuestras riquezas naturales y arqueológicas al viejo mundo. Legados importantes son los de Pál Rosti (1830-1874), Claude-Joseph Désiré Charnay (1828-1915), Teoberto Maler (1842-1917), Augustus Le Plongeon (1825-1908) y Alice Dixon Le Plongeon (1851-1910) quienes, entre otros, visitaron México durante la segunda mitad de aquel siglo.

La fotografía permitió dar cuenta de los avances del país durante la época del Porfiriato, por este motivo la construcción de ferrocarriles fue registrada por Abel Briquet (1833- s/f) y William Henry Jackson (1843-1942), quienes no sólo cumplieron con el encargo oficial, sino que aprovecharon el tema para realizar espléndidas imágenes del paisaje a lo largo del país.

Guillermo Kahlo (1871-1941) y Hugo Brehme (1882-1954) llegaron en 1891 y 1908, respectivamente. Dos grandes fotógrafos de origen alemán que con gran maestría y excelente equipo fotográfico registraron la arquitectura y el paisaje mexicano. El ministro José Yves Limantour le encargó a Kahlo el libro destinado a conmemorar el Centenario de la Independencia de México en 1910, el cual incluye imágenes de monumentos arquitectónicos de todo el país. Hugo Brehme continuó con la tradición y temática de Guillermo Kahlo y realizó magníficas vistas, dadas a conocer al mundo por la publicación México Pintoresco, el libro más importante de fotografía de su tiempo, editado en 1926.

A lo largo del siglo XX nuestros grandes fotógrafos han tocado reiteradamente el tema del paisaje. Es difícil que alguno no lo hiciese, de manera directa o experimental; sin embargo, han sido pocos los enfocados de lleno y casi en exclusiva a este género, que de alguna manera pareció relegado durante décadas. No se puede omitir el trabajo paisajista de Armando Salas Portugal (1916-1995) quien, aparte de dejar un gran legado, hizo aportaciones importantes a las técnicas fotográficas.

El paisaje contemporáneo reúne intencionalmente a siete talentos de una misma generación que, instruida en las técnicas tradicionales de laboratorio, luego experimenta con la alquimia hasta manipular y virar sus trabajos. Estos siete grandes han cruzado el umbral de la era digital, con el rico bagaje aportado por su experiencia, y logran un espacio de expresión visual a partir de la nueva tecnología. Los siete se han dedicado a la representación del paisaje de manera continua y prolífera, en algunos es su única forma de expresión. Todos son proclives a la experimentación técnica, a la perfección y al análisis. Sus miradas han madurado y cada uno logra proyectarse de manera individual a través de sus símbolos, sus conceptos, sus preocupaciones e intereses particulares.

En ciertos casos, sus entornos los han impulsado: desierto, ciudad, montañas, valles o bien, como los viajeros del XIX, exploran continentes a la caza de los paisajes más preciados. Alfredo de Stéfano, Eric Jervaise, Gabriel Figueroa, Gerardo Suter, Javier Hinojosa, Rafael Doníz y Roberto Ortiz Giacomán, muestran, cada uno, su propia interpretación del paisaje y su mirada con los ojos del siglo XXI.

 

Emma Cecilia García Krinsky

Curadora